Tres revistas especializadas reeditaron una encuesta inspirada en las realizadas entre 1977 y 2000. Con votos de Fito, Mariana Enriquez y hasta Víctor Hugo, armaron un top 100 de películas argentinas.
Con el estreno de Argentina, 1985 el cine argentino volvió a estar en el centro de la discusión pública como le pasa cada tanto. Es decir, solamente cuando una película empieza a levantar vuelo es que se vuelve a tomar a las producciones argentinas como algo de calidad, de tradición, de su importancia para el resto del mundo y ahí nos agrandamos y todo eso. Ni que hablar si de golpe una se gana un Oscar.
Por ahí, algún nombre saliente en el elenco o quién dirija o produzca puede ayudar a generar un poco más de charla en las redes, en un grupo de WhatsApp o en la boletería de un cine donde van a preguntar si pasan la última de Darín. En Santa Fe no serán las multinacionales quienes la proyecten. No obstante, en todo el país hay salas orgullosas de estrenar y proyectar el cine propio, porque en cada provincia hay gente que bien lo hace y bien lo preserva manteniéndolo en cartelera o produciendo conocimiento alrededor suyo.
“Con la intención de acercar la historia de nuestro cine a nuevas generaciones de cinéfilos”, integrantes de tres medios especializados en crítica cinematográfica (La vida útil, Taipei y La tierra quema) se mandaron a renovar la también tradicional Encuesta de Cine Argentino que supo organizar el Museo del Cine, entre 1977 y el 2000. El objetivo: armar un listado con las mejores películas, obviamente.
Por la cinemateca nacional
Iván Bustinduy, coordinador en Taipei Revista, habla sobre el proyecto con un entusiasmo alto, aún cuando lo hace por teléfono en el medio de sus vacaciones: “Es un proyecto a pulmón que lo empezamos en mayo, enviamos unas mil encuestas que no todas tuvieron respuesta pero sí recibimos muchísimas. En total relevamos 804 películas, de las que tuvimos que conseguir afiches en buena calidad, rastrear si estaban disponibles para verlas online, las fichas técnicas…”.
Aunque la dificultad de recopilar todo este material puede resultar lógica, es algo que podría no ser tan así, si tan solo se promoviera desde el Estado un archivo que conservara copias de la producción nacional en una calidad decente, cuanto menos: “En muchos lugares, incluso donde la actividad no ha sido tan importante como en Argentina, cuentan con estos archivos, pero lamentablemente seguimos esperando una cinemateca que las recoja, las restaure y las difunda y con un espacio físico que esté a la altura de los films a la hora de proyectarlos”.
Actualmente, las restauraciones y recuperaciones de las cintas son iniciativas antes que producto de una política pública, como lo hace The Film Foundation fundada por Martin Scorsese. “De lo contrario seguimos dependiendo de la colaboración de coleccionistas privados como Fernando Martín Peña, que hace un trabajo muy valioso, pero que no debería ser tan necesario”, se lamenta y agradece Bustinduy al teléfono con Pausa. Como salvedad del último tiempo, cabe destacar la recuperación y restauración de la obra completa de Fernando Birri, producto de un trabajo en conjunto entre el INCAA y la embajada argentina en Roma.
Todas las áreas, todas
Durante la encuesta para encontrar las 100 Mejores Películas Argentinas (“obviamente votadas desde cada subjetividad”), se recolectaron las respuestas de una variedad de personas más amplia que la aplicada en las ediciones anteriores. Fito Páez, Víctor Hugo Morales, Mariana Enríquez, Miguel Rep, Elvio Gandolfo, Gustavo Sala, Mauricio Kartun y hasta el propio Fernando Martín Peña mandaron las suyas.
Por suerte el voto acá no será secreto y se podrá ver qué respondió cada quién en su perfil individual, que se podrá navegar en encuestadecineargentino.com a partir de este 11 de noviembre. “Al pensar la lista para enviar las consultas quisimos armar algo más general pero que a la vez sea gente que sabe de cine, así que convocamos a músicos, escritores, actores, historietistas, artistas plásticos, periodistas, directores de teatro y técnicos de distintas áreas como fotografía y sonido”.
No lo urgente, lo importante
“La lógica mercantil de acumular actualidades y hacerlas caducar con la próxima novedad nunca nos encontró inspirados”, dicen en la editorial del primer número de La Vida Útil Revista de Cine, una definición que explica buena parte del aliento de este proyecto. “Queremos poner al cine argentino en agenda, que lo sigamos revisando más allá de los estrenos de la semana”, explica Bustinduy antes de contar una curiosidad del top 10 de películas argentinas: ninguna es anterior a 1964.
A algunos clásicos de la época dorada del cine argentino (1930 a 1955) como La guerra gaucha o Las aguas bajan turbias, presentes en los tops anteriores, ya empieza a verse la revalorización de otros directores como Leonardo Favio (quizás el director más votado) y la trascendencia del Nuevo Cine Argentino palpable en la presencia de la obra de Lucrecia Martel.
La encuesta se va a presentar este viernes 11 de noviembre en el marco del Festival Internacional de Cine Mar del Plata, mismo día en que va a poder acceder al sitio web con los resultados. El sitio permitirá navegar de manera interactiva entre el top 100 las películas más votadas, el perfil de cada encuestado. El entusiasmo por la historia, los temas, las preocupaciones y las formas del cine argentino genera mucha pasión, muchos medios especializados, muchos podcasts, reuniones y debates en muchísimas formas más, como por ejemplo esta encuesta. Insistimos en que, a esta lista, habría que agregarle más políticas públicas. Cuanto antes.