De Horacio Guarany a Rod Stewart, muchos artistas vieron piezas suyas prohibidas durante la dictadura. Acá, repasamos algunas de las más llamativas.
Son peligrosas las canciones. Son armas cotidianas, que bañan nuestra memoria cada vez que las cantmos o las tarareamos y que pueden dañar a cualquier represor. Son llamadores de la libertad: con una canción tenemos libre albedrío de ser felices o tristes, de sentirnos poca cosa o de empoderarnos a hacer cualquier cosa.
"Tienen esa cosa de colarse en la cotidianeidad y en la permanencia de lo cotidiano. Se maneja horizontalmente, todo el mundo puede cantarlas y contra eso se revela una dictadura, contra lo que no puede manejar. Las canciones son como un agua buena, que se cuela por todos lados", dice Gabo Ferro en el preludio al documental Canciones Prohibidas, un proyecto de hace algunos años en el que se reversionaron piezas censuradas por el COMFER durante la última dictadura cívico militar.
Las canciones prohibidas
A los casos conocidos de cantores como Horacio Guarany ("Estamos prisioneros carcelero. Yo de estos torpes barrotes, tú del miedo"), Pink Floyd y de María Elena Walsh, hay otros casos menos esperables y que tomaron relevancia con el contexto como "Las madres cansadas" de Joan Baez o "Café da Manhã" ("Desayuno") de Roberto Carlos, capaz que porque en una parte dice que no quiere ir a laburar mañana. Y quién te puede culpar, querido Roberto Carlos.
Todas las canciones que enumeramos a continuación, entre otras, fueron prohibidas por atacar al "orden, laboriosidad, jerarquía, responsabilidad, idoneidad, honestidad, dentro del contexto de la moral cristiana", según la lógica militar.
Da ya think I'm sexy? - Rod Stewart
Esa risa de costado, esas mechas rubias como chispas de fuego, el tonito canchero. Rod Stewart era tan sexy que constituía una verdadera amenaza para la juventud argentina, el prototipo de enemigo contra el que el buen soldado tenía que ser implacable.
Ayer nomás - Moris y Pipo Lernoud
"Este país es grande y tiene libertad". "No, ahí te equivocás" le dijo el COMFER a Moris y Pipo Lernoud (autores) y a Los Gatos (intérpretes recurrentes de la época) de esta canción que, más allá de esa frase iniciática, es bastante ambigua y podría ser el panorama triste de cualquier lugar y de cualquier momento. Pero la segunda mitad de los '70 no fue cualquier momento y la libertad, aún adentro de una canción, era imposible para la Argentina.
Cara de tramposo - Cacho Castaña
Anque reproductor de muchas prácticas retrógradas hacia el final de su vida, Cacho Castaña en su momento tenía gente aún más a la derecha de lo que él estaba. Era calculable que a los oídos de los milicos, tenerl el pelo largo y la lengua picante no era la que iba.
Je t'aime moi non plus - Serge Gainsbourg
La versión original de esta canción fue grabada en 1968 por Serge Gainsbourg y su amante de entonces, Brigitte Bardot. Se pasó muy pocas veces por radio y el bueno de Serge la regrabó con su pareja de ese entonces, la actriz inglesa Jane Birkin. ¿Por qué esta fue otra de las canciones prohibidas? Mucha sensualidad para la pacatería, nos atrevemos a arriesgar.