La vicepresidenta señaló que "la dolarización fracasó hace 20 años", cuestionó a figuras de la oposición y evitó dar definiciones electorales, al tiempo que llamó a construir "programas de gobierno". Fue ayer en el Teatro Argentino de La Plata, durante el lanzamiento de la Escuela Justicialista Néstor Kirchner.

La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner señaló que "la dolarización fracasó hace 20 años" en Argentina, advirtió que "el pasado quiere venir nuevamente para condicionarnos" y evitó dar definiciones electorales, al tiempo que llamó al peronismo a construir "programas de gobierno". Además, apuntó duramente al precandidato de La Libertad Avanza Javier Milei y a los referentes de Juntos por el Cambio Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich. Fue ayer en el Teatro Argentino de La Plata, durante el lanzamiento de la Escuela Justicialista Néstor Kirchner.

En su discurso advirtió sobre los riesgos de una "Argentina circular", en la que "el pasado aparece otra vez en el presente", con "figuras e ideas que parecen venir del pasado al presente para condicionar el futuro". En ese sentido, la vicepresidenta aludió varias veces al precandidato de La Libertad Avanza Javier Milei, a quien consideró "discípulo de Cavallo" y caracterizó de "mamarracho" por su slogan "la casta tiene miedo". "¿Miedo de qué? Si nunca te pasó nada, hermano. ¡Caraduras!. Miedo tengo de que mis nietos puedan crecer en un país tan injusto y tan inequitativo", replicó, y sostuvo que "no es causalidad que la única dirigente política que fue condenada, proscripta, inhabilitada e intentada asesinar sea una sola". "¿A quién le van a hacer creer que van a poder controlar lo que hace el poder económico concentrado?", se preguntó.

En la misma línea, evocó el paso del jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta por el Pami y recordó que la referenta del Pro Patricia Bullrich descontó el 13% de los salarios de trabajadores estatales y jubilados y jubiladas cuando estuvo al frente del Ministerio de Trabajo: "Nos vienen a decir que lo que fracasó hace más de 20 años hoy puede ser la solución".

Además, la ex mandataria apuntó además contra el economista Emilio Ocampo, elogiado por Milei, por proponer la transferencia fuera del país de activos y pasivos del Banco Central y del Fondo de Garantía de Sustentabilidad de la Anses para implementar la dolarización, y recordó que muchas de las "principales empresas argentinas" tienen acciones en ese fondo.

"No se hagan los rulos"

Una vez más, la vicepresidenta no hizo alusiones a definiciones electorales, y ante el clamor del público por una posible candidatura, se limitó a responder "no se hagan los rulos". "Yo ya di todo lo que tenía para dar", expresó en otra parte de su discurso, constantemente interrumpido por el ya célebre cántico "Cristina presidenta" entonado por su militancia.

Además, Fernández de Kirchner se dirigió a su propio espacio político y llamó al peronismo a construir "programas de gobierno", porque "no se trata de personas". En ese sentido, afirmó que cuando convocó a la militancia a "tomar el bastón de mariscal" no era para "dárselo por la cabeza a otro compañero", sino para "poder ayudar a pensar una sociedad y un país diferente y ver cómo podemos contribuir a un futuro mejor".

"Créanme que necesitamos un programa de gobierno. Tenemos que ver cómo vamos a manejar nuestros recursos. Tenemos que saber qué vamos a hacer con el litio. Tenemos que definir cómo vamos a manejar lo que se va a dar a partir de la inauguración del Gasoducto Néstor Kirchner con Vaca Muerta. Pero también tenemos que saber que no hay salvaciones milagrosas", enfatizó CFK, que afirmó que "nos va a salvar el trabajo, la tecnología, la innovación, cuidar los recursos, y generar la distribución del ingreso, que reproduce una sociedad más justa y más equitativa".

Yo veo al futuro repetir el pasado

Fernández de Kirchner consideró que "la historia de la Convertibilidad es la historia de la dolarización" y evocó el uno a uno, que "empezó con Plan Bonex y terminó con la captura de todos los depósitos", en referencia al corralito implementado por el gobierno de Fernando De la Rúa en 2001: "Estamos todos discutiendo lo que fracasó hace 20 años. La bomba explotó en la cara de 40 millones de argentinos, en las plazas, en la desocupación y en la captación. Nos dijeron que un peso era igual a un dólar. Significa que primero hubo que capturar todos los plazos fijos en los bancos. Y en virtud de eso, con el Plan Bonex, se pudo anunciar la convertibilidad que fue sostenida con los dólares de las privatizaciones y el endeudamiento que la Nación tomaba para que la base monetaria estuviera respaldada".

En otro fragmento de su discurso se refirió al acuerdo firmado con el FMI, al que caracterizó de "inflacionario", y señaló que se trata de una "política enlatada que se aplica como una receta monotemática a todos los países", motivo por el cual marcó la necesidad de "revisar las cláusulas". "Nadie dice que no haya que pagarle, más allá de la discusión de las sobretasas", expresó, aunque aclaró que en un futuro "va a haber que discutir que las sumas que se paguen al Fondo estén atadas con un porcentaje al superávit comercial". "El FMI fue protagonista de los peores momentos que se vivieron en democracia, en materia económica y en condicionalidades", sintetizó.

"Tuvimos un superávit comercial de 45.000 millones de dólares pero una parte muy importante se fue en pago de las deudas de las empresas privadas", expresó luego CFK, y añadió: "El problema de querer gobernar y conformar a todos, es que terminás enojando a todos". Por otra parte, invitó a todas las fuerzas políticas a "sentarse" y avanzar en acuerdos en materia económica, en vistas a que "el país funcione normalmente y no sea un parto cada elección y un drama cada movimiento cambiario".

En el acto participaron el ex ministro de Educación Nicolás Trotta, la titular de la Dirección General Impositiva Virginia García, la integrante del Instituto Patria Claudia Bernazza, el secretario administrativo de la Cámara de Diputados Rodrigo "Rodra" Rodríguez, de La Cámpora, y la diputada del Frente Renovador Mónica Litza, quienes coordinarán la flamante Escuela Justicialista Néstor Kirchner. Además, entre el público estuvieron el gobernador bonaerense Axel Kicillof, el titular del PJ bonaerense Máximo Kirchner, la ministra de Desarrollo Social Victoria Tolosa Paz y el dirigente social y precandidato a presidente Juan Grabois, entre otros.