—Buenas, ¿cómo está? Hace un año que no lo veo.
—Bien, aquí estoy jugando al tentempié en el precipicio, con el remo empantanado en dulce de leche.
—Entonces, nada cambió. Para el pueblo, lo que es del pueblo...
—Depende, mi sueldo no opina lo mismo...
—"Para el César lo que es del César" incluye la ensalada.
—¿Usted se encuentra bien?
—En realidad, no. Tengo mucho miedo.
—Sí, la realidad económica y los recursos naturales que disponemos son motivo de preocupación. El des-monte…
—Es por un documento preliminar del Pentágono...
—¿Habla usted del informe sobre el litio?
—No, este documento plantea que una nave nodriza extraterrestre estaría enviando sondas a la Tierra y otros planetas del sistema solar. Los autores del documento son Sean Kirkpatrick, director de la Oficina de Resolución de Anomalías en Todos los Dominios del Pentágono (AARO), y Avi Loeb, presidente del Departamento de Astronomía de la Universidad de Harvard.
—Debe ser una noticia falsa... Debe dejar Tik Tok por unos días.
—Vienen por el agua. Empiezan avistando la Tierra y terminan robando un kiosco. Entran por un agujero negro y salen por el otro. ¡Son garantistas galácticos!
—Es posible, pero me parece una idea infundada... ¿Es segura la fuente?
—El Pentágono señor, no cualquiera.
—Bueno, pero son los mismos que tenían información sobre Sadam Hussein y las armas químicas.
—No, esos eran los de la CIA.
—Bueno, es la misma cuenta de Netflix pero con distintos perfiles... Y la NASA libera la zona. Hay que agarrarlos de chiquitos y ponerlos a trabajar. Usted tiene tres dedos, muy bien, aprenda a agarrar la pala con tres dedos. Pero no, nadie se anima a decir las cosas, señor.
—Claro, "No hay que darle el pescado, hay que enseñarles a pescar"... Trasciende los universos y los diferentes planos galácticos.
—Porque no respetan nada. Ni la gravedad. Antes, ¿vos te pensás que te iban a dejar volar por ahí? Ni se nos ocurriría siquiera.
—¿Pero ha hablado usted alguna vez con alguno de ellos, o son puras especulaciones?
—¿Quiénes? Viven viajando. Llevan y traen. La otra vez, en el campo, encontraron una mancha en el pasto y, en el árbol de al lado, había unas zapatillas colgando. Y manejan todo desde la Nodriza, tienen celulares y todo lo necesario. Uno no sabe cómo quitarse los pelos de las orejas y ellos viven como reyes. Y parece que se enganchan a la luz.