Se conformó la comisión que investigará el ataque de grupos bolsonaristas al Palacio de Planalto, entre otros edificios del gobierno. Uno de los sospechosos es Anderson Torres, secretario de Justicia durante la presidencia de Jair Bolsonaro. En tanto, esta semana la Justicia de San Pablo condenó en segunda instancia al ex presidente por atacar a periodistas.
El Congreso de Brasil formalizó este jueves la comisión parlamentaria de investigación (CPI) de los ataques por parte de seguidores del expresidente Jair Bolsonaro a los edificios de los tres poderes en Brasilia el 8 de enero. La misma estará formada por 32 congresistas (en partes iguales entre senadores y diputados) en su mayoría de los partidos del gobierno y aliados. Será presidida por el legislador del partido Unión Brasil Arthur Maia. El cargo de relatora fue encomendado a la senadora de centro-derecha Eliziane Gama.
"Es un momento de la más extrema importancia para el Congreso Nacional. Esta comisión estará prestando un servicio a la democracia", manifestó Maia al medio O Globo. Por su parte, TeleSur dio a conocer que Maia destacó que las investigaciones seguirán todas las formalidades del proceso democrático. El legislador afirmó que la comisión se dedicará a "esclarecer los hechos y no a confirmar relatos".
Por su parte, Gama aseguró: "Hubo un intento de golpe de Estado, pero no lo concretaron. Un hecho está claro: todos los que estamos aquí estamos en contra de lo que ocurrió, independientemente de ser del oficialismo o de la oposición. Queremos garantizar una democracia cada vez más fuerte y firme en Brasil". Y agregó: "No me dejaré intimidar. No estoy aquí como ponente para agradar o desagradar a nadie. Estoy aquí para hacer mi papel y tener responsabilidad pública".
Según informó la Agencia Télam, desde el gobierno de Lula da Silva confían en que esta comisión pueda alcanzar al que fuera secretario de Justicia de Bolsonaro y encargado de Seguridad de Brasilia durante los ataques, Anderson Torres. Recientemente, Torres fue puesto en libertad después de casi cuatro meses en prisión preventiva por aquellos hechos.
La implicación de Torres —tras encontrarse en su domicilio el borrador de un 'decreto golpista'— puede ser el camino para incluir en la investigación a Jair Bolsonaro, que ya tiene una causa abierta como instigador intelectual de los ataques.
Bolsonaro, condenado por molestar a periodistas
La Cuarta Sala de Derecho Privado del Tribunal de Justicia de San Pablo confirmó esta semana la sentencia dictada por un tribunal anterior al ex presidente, por asediar a periodistas. La Justicia consideró que Bolsonaro abusó de su derecho de libertad de expresión para ofender a la prensa y lo condenó al pago de una indemnización de 50 mil reales.
La sentencia es el corolario de una causa iniciada en 2021 por el Sindicato de Periodistas Profesionales del Estado de San Pablo (SJSP). El mismo interpuso una demanda contra el ex mandatario para que dejara de ofender, deslegitimar y descalificar la profesión periodística, además de filtrar datos personales de los reporteros.
El equipo legal del ex presidente argumentó que "nunca hubo censura" y que sus palabras no se referían a todo el oficio, "sino a determinados profesionales".
Según datos de la Asociación Brasileña de Periodismo de Investigación, los ataques del líder ultraderechista a la prensa saltaron desde 130 en 2019, su primer año de Gobierno, hasta 453 en 2021 y hasta 557 en 2022.