"El arte de nuestras manos" abrió el sábado pasado y es administrado por la Cooperativa San Val, integrada por sordos e hipoacúsicos, que busca generar empleo para un sector históricamente excluido del mundo laboral.
En Reconquista se inauguró "El arte de nuestras manos", el primer bar atendido y gestionado por personas sordas en todo el país. El espacio, que abrió sus puertas la noche del sábado pasado, es administrado por la Cooperativa de Trabajo San Val, integrada por sordos e hipoacúsicos nucleados en la asociación civil "Las manos hablan", y también contará con trabajadores con ceguera y con síndrome de down. En su página de Facebook, destacaron que vienen "trabajando en este proyecto para poder brindar a la comunidad un espacio en familia, amigos y compañeros".
El bar está ubicado en la esquina de Patricio Diez y Belgrano, a una cuadra de la plaza céntrica de la ciudad, y tiene una capacidad de 200 personas. Los menúes estarán escritos en español, lengua de señas y braille, y habrá un sistema de luces para llamar a las y los mozos. Además se promoverá la práctica del bádminton para las infancias, ya que el espacio en el que se encuentra el bar -cedido solidariamente por el Centro de Artesanos de Reconquista- cuenta con una cancha de dicho deporte.
La inauguración se dio a través de un acto protagonizado por artistas locales al que asistieron casi un millar de personas, en el que estuvieron presentes el intendente reconquistense Enrique Vallejos, el precandidato a diputado provincial Oscar Rosas y el dirigente mutualista Alberto Bieri, entre otros. En el mismo, Gladys Romero, trabajadora social, promotora de San Val e integrante del Frente Cooperativo Mutual que encabeza Oscar Rosas, declaró que "este es solo el comienzo de los logros de la economía social".
La iniciativa proviene de la Cooperativa de Trabajo y de Inclusión Social San Val, que surgió durante la pandemia para apostar a la creación de empleo de calidad para las personas con discapacidad, un sector históricamente excluido del mundo laboral. San Val también promueve instancias de formación y talleres de oficios; en uno de ellos, el de carpintería, se construyó el mobiliario que se encuentra en las instalaciones de "El arte de nuestras manos".