Las ventas minoristas cayeron 3,6% en julio, en comparación con el mismo mes de 2022. Todos los meses de 2023 registraron caída de ventas, según los datos de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came).
Las ventas minoristas descendieron por séptimo mes consecutivo en julio, al ubicarse 3,6% por debajo del mismo mes de 2022. En los primeros siete meses del año el comercio acumula una caída de 1,6%. También en la comparación mensual, se vendió 3,2% menos que en junio. Los datos son del reporte mensual de Came.
Seis de los siete rubros registraron caídas interanuales en sus ventas. La mayor retracción se ubicó en el rubro de Textil e Indumentaria (-7%) y el único rubro en alza volvió a ser Farmacias (+1,3%). En el sector clave, Alimentos y Bebidas, la merma fue de 4,3% interanual.
"La inflación está golpeando al consumo en todos los rubros de la economía", dice el reporte de Came. "La gente está gastando menos en bienes y servicios, lo que está provocando una desaceleración económica", advierten.
"Los negocios consultados señalaron que las últimas dos semanas del mes fueron muy difíciles, con ajustes de precios diarios, proveedores suspendiendo entregas y sin valores para algunos productos. Frente a una dinámica inflacionaria que se manifiesta en elevadas tasas de aumentos, cada vez más frecuentes, los salarios de los trabajadores quedan muy rezagados. Este fenómeno impacta en la reducción de la demanda verificada. Mientras tanto, los comercios se ven afectados no solo por la caída de ventas, sino por incrementos de costos en alquileres, y otros servicios, que reducen sus márgenes de ganancias", explican.
Específicamente en Alimentos y Bebidas, desde Came señalan: "Las ventas se descendieron 4,3% anual en julio, a precios constantes y acumulan una caída de 1,3% en los primeros siete meses del año frente al mismo periodo de 2022. En la comparación intermensual, bajaron 4%. Este mes, las empresas consultadas reportaron faltantes de azúcar y harinas principalmente, y mucha especulación de precios por parte de los proveedores. En algunas ciudades las boletas de luz llegaron con subas mayores al 100%, y los ajustes en los alquileres fue otro de los problemas manifestados en este sector. Aumentaron las compras con tarjetas y los locales están más vacíos".