Las urnas electrónicas para la elección municipal porteña funcionan mal y ya generaron que el cierre de los comicios en la Ciudad de Buenos Aires se extienda hasta las 19:00. Según la jueza Servini, cerca del 30% de las máquinas no están operativas. "En una escuela tengo un piquete de fiscales".
No imprimen, no toman el voto, no están bien conectadas, están rotas o el service no sabe cómo arreglarlas. Mal auditadas y sin pruebas previas eficaces, las máquinas para el voto electrónico en la Ciudad de Buenos Aires están generando demoras inusitadas en la elección. Ya se dispuso que el cierre de los comicios se extienda una hora más para los porteños.
En la CABA están votando con dos sistemas: la boleta papel y la boleta electrónica. El que no funciona es el segundo, que históricamente es impulsado por Juntos por el Cambio. En redes sociales, se registran colas de más de media cuadra para poder votar. La jueza federal con competencia electoral María Servini denunció graves fallas, en una nota enviada al presidente de la Cámara Electoral, Alberto Dalla Vía.
Servini alertó sobre la “improvisación con que se han manejado tanto la empresa contratada para la provisión e instalación de máquinas de votación como el propio Instituto de Gestión Electoral de la Ciudad de Buenos Aires, evidenciando una impericia nunca antes vista en la realización y ejecución de un proceso electoral”. Servini ponderó que un 30% de las máquinas no están operativas.
En diálogo con la señal de noticias IP, la jueza se escuchó desesperada: "En algunas escuelas el técnico dijo 'no la sé arreglar'. En otras la máquina prende pero no imprime. En otras faltan cables. Es una improvisación". Además, dijo en declaraciones al canal C5N que "más de 200 máquinas no funcionan" en la ciudad de Buenos Aires para el voto electrónico y manifestó que "en una escuela tengo un piquete de fiscales".
“No puedo hacerme responsable por las situaciones descriptas ni por sus posibles consecuencias, al no haber sido generadas por el accionar de este tribunal”, dijo la enojada jueza en la nota enviada a Dalla Vía. “A lo largo de la jornada se han presentado diversas dificultades relacionadas con su instalación, prueba y puesta en funcionamiento”, aseveró Servini. Así, describió que “en algunos locales las máquinas en cuestión llegaron recién en horas de la noche” de ayer, “en otros nunca llegaron o estaban ubicados de manera incorrecta; en otros no habían sido conectadas ni probadas; en muchos locales no estaban los kits de instalación; algunas de ellas directamente no funcionaban”.
De acuerdo con datos de la Cámara Nacional Electoral y del Tribunal Electoral de la Ciudad de Buenos Aires, pueden emitir sufragio unos 2.533.092 residentes, de los que unos 1.214.871 son hombres, 1.318.002 mujeres y 219 personas que se manifestaron no binarias.