En un acto que contó con la presencia de Agustín Rossi y ministros nacionales y provinciales, más de 70 familias de la ciudad de Santa Fe recibieron las llaves de sus nuevos hogares.
Flavia y David abren la puerta de su casa por primera vez. Su hija, que se puso sus mejores pilchas para la ocasión, corretea de un lado a otro y se desliza por el piso limpio del departamento vacío. "Hoy no fue a la escuela porque estaba muy ansiosa", cuentan. Y sí: cumplir un sueño no es cosa de todos los días.
Más de 70 familias recibieron la llave de sus propiedades este viernes, en un acto que contó con la participación del jefe de Gabinete de Ministros, Agustín Rossi, el ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat, Santiago Maggiotti, y la ministra de Infraestructura, Servicios Públicos y Hábitat provincial, Silvina Frana.
Las viviendas forman parte del Desarrollo Urbanístico Parque Federal de Procrear II en la ciudad de Santa Fe, y demandaron una inversión de $1.261 millones. Eso sin contar la planta que una tía trae de regalo para sus sobrinos, flamantes propietarios, o la docena de facturas que Mateo compró para compartir con su señora y los nuevos vecinos.
Las puertas de los departamentos están abiertas. Si uno sube por las escaleras lo veinte pisos que tiene la torre, escucha un sonido común en todos los pasillos: el del asombro y la algarabía, incluso el de cierta ansiedad resquebrajándose. Las familias propietarias no sólo están conociendo sus nuevas casas, si no que también están disfrutando de este momento colectivo, de esta primera charla con los vecinos, de presentarse a las familias y las mascotas.
"Hace dos años estábamos esperando, fuimos acreditados en el 2021", cuenta Brenda. Con su compañero, Leandro, trajeron a toda la familia para compartir este momento. Su hija también bailotea en el espacio vacío del que probablemente después va a ser el living de su casa y que, por facha e iluminación, va a ser el escenario propicio para más de un challenge de TikTok. Lo que más entusiasma a la familia es vivir rodeados de un entorno verde, por supuesto no pagar alquiler: "Nunca pensamos en tener la casa propia, sobre todo con lo difícil que está ahora todo. Si no era así, no lo íbamos a lograr. Estábamos alquilando, así que fue una bendición", dice Leandro. Brenda acota que tres veces habían pasado ya como familia por el periplo del alquiler. "Estamos muy felices porque llegó el momento. Llegó el día".
"El día" del que Brenda habla es, en definitiva, el sueño de miles de argentinos y argentinas. Ese sueño precisa, hoy más que nunca, de un estado presente: "Argentina tiene desigualdades sociales y también regionales. Para resolverlas también se necesita de la obra pública", comenta Rossi. En ese sentido, el jefe de Gabinete y candidato a Vicepresiente entiende que "imaginarse una Argentina sin obra pública, sin obra hecha por el Estado, significa pensar una Argentina sin plan de viviendas ni planes de infraestructura que permitan acortar las asimetrías".
El Gobierno Nacional lleva entregadas ya más de 128 mil viviendas a lo largo de todo el territorio nacional desde que asumiera la gestión en diciembre de 2019. Las viviendas son de 1, 2, y 3 dormitorios, con cocheras e infraestructura básica, y vienen equipadas con cocina y calefacción, e incluso cada familia se lleva a su nueva casa una biblioteca del programa Libros y Casas, dedicado a la promoción de la lectura y a garantizar el acceso igualitario a bienes culturales en todo el territorio.
"Es un momento inolvidable para mi, el de tener casa propia. La verdad que un sueño cumplido para mi. Y espero que cada vez más gente pueda cumplir el sueño de la casa propia. Gracias tanto al gobierno provincial como el nacional. ¡Y que la gente se anote y crea!" agrega otra vecina, que vino maquillada y peluqueada para la ocasión, consciente de que estas fotos que va a sacar hoy la van a acompañar para toda la vida.
"Ahora hay que hacer una fiesta, comprar un Fernet, algo", dice Eugenia, escoltada por dos sobrinos y su gato Ricky, al que también trajo a conocer su nueva casa. "Hay que llenar todo esto", dice el sobrino más chico. Sí, con un cuadro de Messi, alguna planta, un buen sillón para tomar mates, la manta de tigre que la abuela compró en Paraguay, ese souvenir viejo que te trajiste de Mar del Plata o la foto de casamiento de tus viejos. Con lo que quieras, capo. Es el privilegio de ser propietario, ¿o no?