Peor que la inflación es perder el laburo. En casi cuatro años más de 1.171.000 consiguieron un laburo registrado. Entre 2015 y 2019, un modelo de ajuste puro, esa cifra fue de 105 mil. Más de 342 mil consiguieron laburo privado en este gobierno, contra la pérdida de 233 mil con el neoliberalismo duro.
Existe un discurso continuo sobre la falta de creación de trabajo registrado, sobre todo en el sector privado. Las cifras muestran una realidad completamente opuesta y no estamos hablando de encuestas o muestreos, sino de los registros de Anses, los números que declaran los propios empleadores. No son cifras truchas ni una encuesta, son los datos que surgen de los aportes jubilatorios que los trabajadores pagan (y que los empleadores declaran).
El trabajo registrado crece a buen ritmo en modelos que lo cuidan y cae en picada en modelos a los que no les importa. No es opinión, son datos. Durante el ciclo 2015-2019, poco más de 105 mil personas alcanzaron un empleo registrado, esa cifra se estira a más de 1.171.000 a julio de 2023, último dato disponible, en 44 meses de presidencia de Alberto Fernández. Más directo: con el modelo actual la creación de trabajo registrado es casi doce veces mayor que con el liberalismo.
Incluso habiendo atravesado la pandemia y los efectos de la guerra en Ucrania y de la sequía, la gestión económica iniciada en diciembre de 2019 tiene un impacto en el mercado laboral cualitativamente inverso a la de un modelo liberal.
El principal impulso proviene del trabajo privado y los monotributistas. El macrismo fue una máquina de destruir empleo privado, contra lo que postula públicamente: entre 2015 y 2019, más de 233 mil personas perdieron su trabajo privado registrado. Con Fernández, más de 342 mil personas obtuvieron un trabajo privado registrado, mientras que se sumaron más de 385 mil monotributistas
Peor que la inflación es no tener trabajo
El empleo registrado en general crece hoy a un promedio de más de 26 mil trabajadores nuevos por mes, contra los poco más de dos mil mensuales que se sumaban durante el macrismo. Así, pese a una caída de casi 400 mil trabajadores entre diciembre de 2019 y junio de 2020, el pico de la pandemia, hoy ya el signo es positivo y récord. La creación de empleo registrado con los 44 meses de gobierno de Fernández ya es casi doce veces mayor que en todo el gobierno de Macri.
Las principales fuentes de nuevo empleo registrado provienen de los monotributistas y el sector privado. Los monotributistas autónomos, no sociales, crecieron a un ritmo de 8700 personas nuevas promedio por mes con Fernández, contra 3400 con Macri. Hoy hay más de 2.006.000 monotributistas, se sumaron más de 385 mil con Fernández.
Unas 342 mil personas consiguieron un trabajo registrado privado durante el gobierno de Fernández. Es la fuente de nuevo empleo cualitativamente más distinta respecto del macrismo. ¿Por qué? Con el modelo de Juntos por el Cambio más de 233 mil personas perdieron su trabajo privado registrado. Es un montón: fue una retracción del 3,7% en la cantidad de trabajadores registrados privados. A enero de 2023, se recuperó todo el trabajo privado registrado destruido por el macrismo, se superó el pico de marzo de 2018 y se alcanzó un récord, que fue superado en febrero y en marzo.
En abril, sobreviene la baja estacional del empleo registrado privado. La merma en este año fue muy menor, y el repunte estacional ya se adelantó a mayo y se consolidó en junio y julio.
Este cuadro lo releva mejor, pues muestra las variaciones interanuales: compara cuántos trabajadores privados registrados hay en un mes y en el mismo mes del año anterior. Cabe señalar que entre el 1% y el 1,5% ha de ser el alza anual mínima para acompañar el aumento de la población.
Así, se puede ver que durante los cinco últimos años de CFK hubo apenas cinco meses donde se destruyó trabajo y que durante el gobierno de Fernández sólo se destruyó trabajo entre diciembre de 2019 y marzo de 2021, casi todo pandemia.
Sin embargo, durante el gobierno de Juntos por el Cambio el cuadro es completamente inverso. En términos interanuales, en apenas 17 de los 48 meses del mandato de Mauricio Macri hubo creación de trabajo privado registrado, sólo entre marzo de 2017 y agosto de 2018. Y cuando hubo creación de trabajo, el máximo crecimiento interanual fue de 1,4%.
Actualmente, el ritmo de crecimiento interanual del trabajo registrado privado es altísimo: entre mayo de 2022 y febrero de 2023 fue del casi el 4% al 5%. Es un montón, un ritmo crecimiento equiparable o superior al de los mejores momentos de CFK. Ahora está en casi 3,3%, que también es un nivel altísimo.
Otra forma todavía más gráfica de mostrar la diferencia de modelos respecto de la creación de trabajo privado registrado es mostrar cuántas personas consiguieron (o perdieron) su laburo privado formal por mes en cada período de gobierno. Con CFK, 3671 personas por mes, en promedio, obtenían un trabajo registrado privado. Con Macri, 4867 personas lo perdieron cada mes. Con Fernández, 7781 personas, todos los meses, en promedio, se convierten en en trabajadores privados registrados.
Resulta así que el modelo económico actual, planteado en el peor contexto mundial de lo que va del siglo, genera muchísimo más trabajo del sector privado que el modelo 2015-2019. No es opinión, es dato duro.
La industria vuela
El principal motor del crecimiento del sector privado es la industria. Allí es donde más se revela la diferencia. Con el último modelo liberal, se destruyó más del 13% del trabajo registrado industrial. Son casi 169 mil obreros menos. A la inversa, con Fernández van más de 105 mil nuevas incorporaciones, una suba del 9,7%. La curva se explica por sí misma.
Uno de los sectores más afectados por la pandemia fue el del comercio, la hotelería y los restaurantes, de fuerte impacto en las clases populares. También se contrajo durante el macrismo, un 2,5%, mientras que ahora ya muestra un crecimiento de más de 123 mil trabajadores registrados nuevos, un alza de 8,9% en la comparación julio de 2023 con diciembre de 2019. Además, ya también frenó su merma estacional y repunta a todo vapor.
Por último, otra de las principales fuentes de trabajo registrado para las clases populares es la construcción. Aquí también, el achicamiento en la cantidad de trabajadores registrados durante el macrismo fue feroz: una retracción del 8,3%. Con Fernández lleva un 12,3% para arriba.
Público y privado
A la inversa, el empleo privado registrado creció en más 342 mil puestos. Es mucho más que el crecimiento del empleo público y tiene mucha mayor incidencia sobre el total del empleo registrado.
Para entender la diferencia. Con el modelo liberal ingresaron 108 mil personas al empleo público, es más que todo el empleo registrado nuevo creado durante la gestión 2015-2019 (105 mil personas). Dicho más directo: si no fuera por los ingresos al Estado, así fuesen meramente estacionales y vegetativos, con el modelo liberal la creación de empleo registrado hubiera dado negativo.