Candela Francisco se consagró campeona mundial juvenil con 17 años de edad, mientras que el niño Faustino Oro (9) se convirtió en el jugador más precoz en obtener una norma de maestro internacional.
A fines de 2020 explotaba la serie “Gambito de dama”, una historia que cuenta la vida de una huérfana prodigio del ajedrez durante su búsqueda para convertirse en la mejor jugadora del mundo. El reconocimiento mundial de la serie provocó que el ajedrez estuviese en el centro de la escena mundial.
Mientras tanto, en Argentina, una adolescente crecía en su juego y se proyectaba en un camino que la llevaría a ser la mejor juvenil del mundo. La bonaerense Candela Belén Francisco, de 17 años, se consagró campeona mundial juvenil de ajedrez en México el pasado 1 de octubre y se convirtió en la primera mujer argentina en lograrlo.
La consagración de Candela fue extraordinaria. La bonaerense llegó al título de manera invicta imponiéndose en la última jornada a la búlgara Beloslava Krasteva, segunda en la preclasificación. Krasteva tenía 8,5 puntos cuando se enfrentaron en la última ronda, y con su victoria la argentina la alcanzó en puntos en 11 rondas y se terminó consagrando con un mejor sistema de desempate.
Otro punto a subrayar de la ajedrecista de nuestro país pasa por los tres años de ventaja que le dio a sus competidoras, porque el torneo era de la categoría sub-20, lo que le abre un futuro enorme para su carrera. Vale destacar que la joven argentina ya había alcanzado el título de campeona de América en el certamen de mayo pasado en La Habana.
El campeonato conseguido por la joven de Pilar (Buenos Aires) es un logro inédito para una mujer argentina. Este acontecimiento ya se había dado entre los varones: Oscar Panno en 1953 en Copenhague, Carlos Bielicki en 1959 en Münchenstein y Pablo Zarnicki en 1992 en Buenos Aires.
La gran maestra femenina Candela Francisco llegó a la última ronda en México con 7,5 puntos, como una de las tres escoltas de Krasteva, segunda preclasificada que lideraba hasta ese momento con 8,5. En la narración técnica de cómo se dio la partida que le daría el título, la crónica cuenta: “La búlgara jugaba con piezas blancas y a Candela no le servían las tablas si pretendía ser campeona, por lo que mostró de entrada un juego ofensivo y se sumergió en una lucha posicional, sacrificando un peón para tener más espacio en el ataque al rey rival. Cuando llegó el apremio de tiempo del reloj para el control de las 40 movidas, en la 39 la argentina sacrificó su dama por una torre, mientras que en vez de comer caballo, lo que hubiera llevado a una purificación de piezas y forzar un final parejo con torre y tres peones por lado, Krasteva eligió quedarse con su reina, y ese fue un error que pagaría caro porque derivaría en la victoria de Francisco. La argentina armó un ataque al rey y su adversaria perdió la dama, para arribar entonces a un final de dos torres y tres peones con un alfil limpio de más para que la nueva campeona alcanzara la victoria en 53 movidas”.
La alegría total demoró un tiempo, porque Candela debió esperar que en la mesa número 2 la estadounidense Carissa Yip y la india Trisha Kanyamarala resolvieran su partida. La norteamericana ganó e igualó los 8,5 puntos de la argentina, pero el mejor sistema de desempate consagró a Candela.
Camino al éxito
Candela batió a la costarricense Sofia Mayorga (1825 ELO), al colombiano Manuel Hernández (1905 ELO), a la canadiense Svitlana Demchenko (2169 ELO), a la noruega Ingrid Skaslien (1919 ELO), a la armenia Mariam Mkrtchyan (2343 ELO) y a Krasteva, en tanto entabló con la kazaja Zeinep Sultanbek (2022 ELO), la china Miaoyi Lu (2214 eLO), la polaca Barbara Goraj (2135 ELO) y la india Mounika Bommini (2096 (ELO) y Yip.
La oriunda de Pilar representa al Círculo de Villa Martelli. A los 16 años fue campeona de América y ahora, a los 17, ya lo es mundial juvenil en una categoría para ajedrecistas tres años mayores que ella, por lo que hoy ya es considerada la mejor argentina de la historia, destronando a Carolina Luján, de 38 años, maestra internacional absoluta considerada hasta ahora como la reina de Argentina.
Palabra de campeona
En su regreso al país, Candela brindó una conferencia de prensa en el Aeropuerto de Ezeiza y contó: “Antes de la última partida que definió el torneo, era un montón la gente que pasaba a saludarme, a desearme suerte, gente que no me conocía, estoy agradecida por tanto cariño. Siento una enorme felicidad de ser la primera mujer argentina en lograr este galardón. Realmente no me cae la ficha todavía, van a tener que pasar varios días para que asuma lo que está sucediendo”.
“Fueron un montón de años estudiando y trabajando para esto y haberlo conseguido es una satisfacción inmensa”, relató. Y cuando habló de sus comienzos en el ajedrez, dijo que “fue algo impensado, en mi familia nadie sabe jugar”, y agregó: “cuando tenía 4 años me regalaron un tablero, pero no le di mucha bolilla en ese momento, era muy chiquita”.
Mientras sus padres ayudaban en un comedor de niños, Candela y sus amigas también iban, “pero desorganizábamos todo” recordó. “Mi mamá vio que en Pilar Point, que es un shopping pequeño, daban clases de ajedrez todos los sábados por la mañana y me preguntó si quería ir y acepté”. Al poco tiempo su abuelo se enteró que en Pilar había una Escuela Municipal de Ajedrez y la anotó. Luego la invitaron a participar de un torneo nacional y quedó tercera. “Ese fue el inicio de mi carrera”, contó.
Su vida cotidiana está ligada al ajedrez. “Ahora me cambié de colegio y curso desde casa, por lo tanto tengo más tiempo para preparar y, mi mamá puede dar fe, estoy todo el día, desde que me levanto, con el ajedrez”, explicó. En rueda de prensa, Candela hizo un llamado a “todos los chicos y chicas de mi edad para que se decidan a practicar ajedrez, que sea un deporte más, como jugar al fútbol. Da muchas satisfacciones y ayuda mucho a pensar. Háganlo como un juego, diviértanse y disfruten”.
El pibe de oro
Faustino Oro es un niño de Buenos Aires que cumple diez años este 14 de octubre, hace tres años descubrió el ajedrez (en pandemia), y el mes pasado ejecutó una nueva jugada para la memoria. En el torneo ITT (Torneo de Título Internacional) “Copa Ciudad de Comodoro Rivadavia”, cumplió una actuación sensacional, suficiente para obtener su primera norma de maestro internacional (son necesarias tres para homologar el título), convirtiéndose de esta manera en el más joven ajedrecista en el mundo en obtener dicho logro.
El caso Faustino Oro es algo único en el historial del ajedrez vernáculo y atrapa la atención de la mayoría de los expertos, incluso de la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE, según sus siglas francesas), que en sus redes sociales le dedicó palabras de felicitaciones por su labor en la provincia de Chubut. Recién en septiembre de 2020 (un mes antes de cumplir 7 años), Faustino comenzó a estudiar ajedrez junto a su profesor, el maestro internacional marplatense Jorge Rosito. Desde entonces, en cada una de sus actuaciones, el chico consiguió batir plusmarcas: fue (y es) el mejor ajedrecista Sub 8, Sub 9, Sub 10 e incluso Sub 11 del planeta en los más de quince siglos de historia documentada que tiene este juego. Fue el ajedrecista más precoz en obtener los títulos de Maestro Candidato y Maestro FIDE, los primeros peldaños de una escalera que continúa con el de maestro internacional y por último de gran maestro.
En el ajedrez, como en la mayoría de los deportes, los jugadores se miden por un ranking, que en esta disciplina se llama Elo. Actualmente Faustino elevó la vara hasta los 2325 puntos (con su actuación en Comodoro Rivadavia ganó otros 30 puntos de Elo en su ranking); un puntaje que jamás nadie obtuvo a esa edad, batiendo así las marcas de otras legendarias figuras de este juego como los casos de Bobby Fischer, Garry Kasparov y el propio Magnus Carlsen, considerado por algunos como el mejor de todos los tiempos.
“Con Fausti estoy perdiendo mi capacidad de asombro; soy su entrenador y te aseguro que me deja sin palabras por la manera de resolver las cosas difíciles que tiene una partida. Para mí tiene todo lo necesario para triunfar, más allá de la contención familiar, está su personalidad y carácter; él viajó a Comodoro convencido de ganar el torneo. Lo que sucedió en Chubut y que fue noticia para todo el mundo para mí no lo fue, sabía que lo iba a lograr. Su ascenso es imparable”, declaró su entrenador, Jorge Rosito.