Así lo dispuso María Eugenia Capuchetti, la jueza federal que también tiene a cargo la causa por el atentado contra Cristina Kirchner.
Los Reyes Magos pasaron de manera tardía por la casa de Mauricio Macri y le llevaron de regalo el sobreseimiento en la causa que lo investigó junto a su prófugo operador judicial Fabián "Pepín" Rodríguez Simón y a su exministro Germán Garavano por armar causas judiciales contra dirigentes sindicales y del peronismo. Sin embargo, el fiscal Franco Picardi apeló la medida.
La responsable de la decisión fue la jueza María Eugenia Capuchetti, quien también tiene a su cargo la causa por el atentado contra la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
De acuerdo con la magistrada, no existieron pruebas sobre un complot para el armado de causas judiciales entre sectores de la gestión Cambiemos y el Poder Judicial.
"Transitada una extensa investigación que insumió más de cuatro años y relevado el itinerario procesal que aquí nos ha traído”, las conductas denunciadas "no constituyen delito alguno", indicó el fallo.
Luego agregó que "la inexistencia de tal asociación ilícita no surge solo de la prueba recolectada (que mal conduce a corroborar una coordinación jerárquica, una distribución de roles y un plan con acuerdo previo y común para cometer delitos indeterminados), sino también de las propias conductas denunciadas".
Según trascendió, el fallo fue firmado antes del inicio de la feria judicial de enero y ya fue apelado por el fiscal Franco Picardi.
A su vez, Capuchetti resaltó en el fallo que quienes fueron presionados para direccionar las investigaciones, nunca denunciaron en su momento los hechos ni tampoco cuando declararon.
"Se trata aquí de magistrados del Poder Judicial y del Ministerio Público Fiscal, que no solo se presume conocen el derecho y, por lo tanto, pueden mínimamente distinguir un accionar delictivo de aquel que no lo es, sino que, además, cuentan con la carga pública de denunciar ante la existencia de un delito como tal", fundamenta el fallo.
La jueza también valoró que no puede considerarse como “presión” los comentarios en la prensa sobre esos magistrados. "Tampoco podía incluirse como parte de esas supuestas presiones la actividad de la prensa”, dijo.
Los otros funcionarios sobreseídos fueron la exdiputada Graciela Ocaña, el fiscal general de la ciudad de Buenos Aires, Juan Bautista Mahiques, y el exministro de Trabajo Jorge Triaca.