Javier Milei obtuvo la sanción de la Cámara de Diputados de un proyecto que desguaza al Estado y que no tiene ninguna medida en beneficio de las mayorías, gracias al aporte de los diputados colaboracionistas del PRO, la UCR y Hacemos Coalición Federal.
En 54 días, Javier Milei dio un paso trascendental para lograr lo que a Carlos Menem le tomó muchos años. Si el Senado lo permite, puede rematar de un saque el país. En el camino, trató a quienes colaboraron con él de casta y coimeros y obtuvo una sanción de Diputados sin que todavía esté firme el texto. Nadie sabe exactamente qué carajo votó.
De los borradores, se puede saber que privatizarán la flota aérea, los trenes, la fábrica de buques, toda la red de medios públicos, el servicio de agua y saneamiento del AMBA, la operación de puertos, entre muchas otras empresas. Parcialmente, venderán joyas como Arsat, las centrales nucleares y el Banco Nación.
La ley le permite al gobierno fumarse toda la plata de los jubilados (las acciones del Fondo de Garantía de Sustentabilidad) y que pueda tomar deuda externa en los montos que se le cante. El ministro de Economía, Luis Caputo, ya lo hizo como nunca nadie en la historia.
La ley intensifica las capacidades represivas y punitorias del Estado contra quienes se manifiesten, habilitando la persecución política directa la protesta.
La ley avanza sobre el financiamiento de la cultura y la protección ambiental de bosques y glaciares.
Milei logró esto con 37 diputados. Sin los oficios de Miguel Pichetto (Hacemos Coalición Federal), Rodrigo de Loredo (UCR) y Cristian Ritondo (PRO), este nuevo desguace de Argentina no hubiera avanzado.
Hay quienes dicen que esa banda de gusanos está cumpliendo un servicio a la República, que sostienen a un gobierno débil para que no estalle y que lograron sacarle casi dos tercios de los artículos originales.
En verdad, el corazón real del proyecto original es vender el país por dos mangos a los capitales financieros y endurecer la dependencia a través del endeudamiento. Todo eso Milei lo obtuvo hoy.
109 diputados en contra, 144 a favor. Además de Unión por la Patria y Mónica Fein y Esteban Paulón del socialismo –las únicas dos fuerzas políticas que enfrentaron de frente al fascismo en el ballotage– se opuso todo el FIT (cinco diputados), Natalia De La Sota, Margarita Stolbizer, los radicales Facundo Manes y Pablo Juliano y el santacruceño Sergio Acevedo.