El embajador Riyad Mansour exigió al organismo que condene la masacre ocurrida ayer, en la que las fuerzas israelíes abatieron a 104 personas que esperaban ayuda humanitaria: "Mientras el Consejo de Seguridad esté paralizado y vetado, le está costando la vida al pueblo palestino".

El embajador palestino ante la ONU, Riyad Mansour, reclamó al Consejo de Seguridad que condenara la muerte de 104 personas que esperaban ayuda humanitaria ayer en Gaza y fueron abatidas por las fuerzas militares israelíes. La masacre ocurrió en el marco de un operativo de distribución de alimentos en el enclave, que es asediado desde hace casi cinco meses. Según el Ministerio de Salud palestino murieron 104 personas y 760 resultaron heridas.

El Ejército israelí, por su parte, sostiene que sus fuerzas dispararon contra un grupo de palestinos que esperaba ayuda y mataron o hirieron a 10 de ellos, y que la mayoría de las víctimas se produjeron en un incidente posterior, ya sea por una estampida o por haber sido arrollados por los camiones que distribuían la asistencia.

Para debatir los sucesos, y a pedido de Argelia, el Consejo de Seguridad se reunió de urgencia ayer a la tarde. "El Consejo debería decir es suficiente", declaró Mansour a la prensa luego de formalizar su pedido en el organismo, y consideró que "esta atroz masacre es testimonio de que mientras el Consejo de Seguridad esté paralizado y vetado, le está costando la vida al pueblo palestino".

Estados Unidos -el mayor aliado de Israel-, al ser uno de los cinco miembros permanentes del Consejo, dispone de un derecho a veto que ya ha ejercido en tres ocasiones para impedir que el organismo pidiera un alto al fuego. Mansour contó que se reunió con la embajadora estadounidense ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield, y le "imploró" que el Consejo pronuncie "una condena de esta matanza" y persiga "a los responsables".

Cinco meses de asedio

Desde el ataque de Hamas a Israel el 7 de octubre, Gaza y el norte de la franja costera palestina han sido objetivos de la ofensiva aérea, marítima y terrestre israelí. Con la matanza de ayer, ya son 30.228 los muertos desde esa fecha, según informó el Ministerio de Salud de Gaza, que también reportó 71.377 personas heridas.

La zona fue devastada y ha estado aislada del resto del territorio durante meses. Según la ONU, una cuarta parte de los 2,3 millones de gazatíes padecen hambre y uno de cada seis niños sufre desnutrición aguda -15 veces más que antes del inicio de la guerra-.

En este contexto, las organizaciones señalan que es casi imposible entregar ayuda humanitaria en Gaza, en parte debido a las multitudes de personas desesperadas que abruman las caravanas. Según la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (Unrwa), unos 2300 camiones de asistencia ingresaron en febrero -82 por día-, lo que representa un 50% menos en relación a enero.

Con información de Télam.