Desde marzo, Santa Fe y Buenos Aires han estado coordinando medidas de seguridad, que comenzaron con el envío de 80 camionetas de la Policía de la provincia de Buenos Aires a Rosario para apoyar a las fuerzas locales en la lucha contra el "narcoterrorismo". Ambos mandatarios recorrieron la Central OJO, en la sede de la Gobernación de Rosario, un centro dedicado al procesamiento de información para la prevención del delito.

Pullaro indicó que esta nueva etapa de trabajo consistirá en "compartir inteligencia criminal que nos permitiera a nosotros adelantarnos al delito, pero fundamentalmente tener la información necesaria porque los límites jurisdiccionales no son los mismos que tienen las organizaciones criminales”.

Agradeció particularmente no sólo a Kicillof por la visita, si no por el acompañamiento: “En esos momentos tan duros recibimos el acompañamiento del gobierno federal, que estuvo trabajando al lado nuestro, pero también delos gobernadores. Y en particular, quiero destacarlo, el acompañamiento y la preocupación del gobierno de la provincia de Buenos Aires. El respaldo del gobierno nacional lo tuvimos y del resto de los gobernadores también. Y no fue menor para ordenar esta discusión, que es una discusión federal y nacional”.

Continuando con esta idea remarcó: “Quiero agradecerle sinceramente (a Kicillof) porque lo que hizo fue entender que hay peleas, hay momentos, en los que las divisiones políticas no deben dividirnos en una cuestión que es de fondo, que tiene que ver con la vida, con los bienes de la gente, pero fundamentalmente tiene que ver con organizaciones criminales internacionales que están golpeando a nuestras provincias, particularmente a la nuestra. Y los hechos que están ocurriendo aquí claramente ameritaban un respaldo y un acompañamiento del resto de los gobernadores”.