El grupo Contratelón Teatro presenta la obra de Arístides Vargas los dos fines de semana próximos en Estudio Barnó. La misma narra la historia de dos emigrados que reconstruyen su pasado a través del diálogo y sortean juntos la tristeza del exilio.
El grupo Contratelón Teatro presenta cuatro nuevas funciones de "Nuestra señora de las nubes", obra de Arístides Vargas. Será los viernes 4 y 11 y los sábados 5 y 12 de octubre en Estudio Barnó (Marcial Candioti 3910).
Bruna y Oscar (interpretados por Soledad Almirón y Camilo Céspedes) son dos exiliados que en cuatro encuentros y tres relatos escénicos reconstruyen su pasado a través del diálogo. Así, se proponen evocar al pueblo y sus personajes antes de que el olvido les juegue una mala pasada para sortear la tristeza y el abandono y aferrarse a la identidad que alguna vez tuvieron.
El elenco lo completan Ignacio Estigarribia en diseño de vestuario, Leonardo Gregoret en fotografía, Federico Kessler en sonido e iluminación, Marina Vázquez en consultora de proyecto y Hernán Rosa en dirección general.
En una reseña publicada en Pausa el año pasado, Roberto Schneider valoraba: "Los hacedores de este espectáculo demuestran que lo racional, lo religioso o los impulsos frente a la reflexión significan una ceremonia de amor frente al poder. Son dos exiliados. Son una mujer y un hombre dispuestos a ser libres. Lo que los espectadores vemos no es una representación en el sentido convencional de la palabra, sino más bien una transformación".
Las entradas están a la venta de lunes a viernes de 16 a 20 a través del 342 6109467 o presencialmente en Estudio Barnó. El teatro cuenta también con un bar que prepara tragos de autor: la entrada general con un trago tiene un costo de 11 mil pesos. La entrada sola sale $8000; para estudiantes y jubilados $6000 y para asistentes a talleres del estudio $5000.
Sobre Arístides Vargas
Arístides Vargas nació en Córdoba en 1954. Dramaturgo dueño de una poética singular, de alto valor literario, barroca en la sobrecarga de sus metáforas, que transforman la visión de lo cotidiano. Su poética teatral es una síntesis de los dolorosos procesos del exilio argentino, tema constante en todas sus obras.
Víctima del terror y la represión, se exilió en Ecuador, donde fundó en 1979 el grupo Malayerba, junto a su compañera, la española Charo Francés, y otros artistas. Malayerba es hoy uno de los referentes internacionales del teatro latinoamericano, donde ha presentado casi totalidad de su obra: entre otros títulos, estrenó Jardín de pulpos (1992), Pluma (1995), Nuestra Señora de las Nubes (2000), El deseo más canalla (2000), La muchacha de los libros usados (2003) y La razón blindada (2005). Malayerba cuenta con una casa abierta a todos los grupos del teatro latinoamericano, en Quito, donde además se ha brindado formación y entrenamiento a cientos de teatristas ecuatorianos.
Sus personajes regresan una y otra vez, a las mismas obsesiones: el viaje, la memoria, la identidad, la violencia, la pérdida y el desarraigo. A pesar de eso, el humor siempre se hace presente en su escritura.