El Relevamiento Nacional de Personas en Situación de Calle se llevó a cabo por segunda vez en nuestra ciudad en octubre. Se registraron 648 personas, en lo que representa un incremento del 28% en relación al año pasado.
El Relevamiento Nacional de Personas en Situación de Calle (ReNaCALLE) se llevó a cabo por segunda vez en la ciudad de Santa Fe a lo largo de octubre. La iniciativa fue impulsada por organizaciones sociales y eclesiásticas, partidos políticos y universidades, con el objetivo de recabar información que ofrezca un diagnóstico preciso y sirva de base para el diseño y la ejecución de políticas públicas ajustadas a las necesidades y características del sector.
La metodología del relevamiento fue múltiple, y abarcó recorridos a pie y en vehículo a lo largo de varias jornadas y cuestionarios realizados en ollas populares en puntos estratégicos de la ciudad. En rasgos generales, se buscó indagar sobre las características de las personas en situación de calle (PSC) -rango etario, género, nivel educativo, situación laboral, estado de salud- y las razones por las que llegaron a tal situación.
Históricamente, la información estadística sobre las PSC ha sido "insuficiente o inexistente", según destacaron quienes llevaron a cabo el relevamiento: "Es a partir de la Ley Nacional N° 27.654 de Situación de Calle y Familias sin Techo, y con su posterior reglamentación, que se llevó a cabo el primer ReNaCALLE en el año 2023 motorizado por el Estado Nacional, organizaciones sociales y universidades nacionales".
"Sin embargo, a pesar de la existencia de dicha ley, ningún nivel del Estado promovió la realización del ReNaCALLE en el presente año, por lo cual fueron las organizaciones sociales y las universidades quiénes impulsaron este relevamiento", resaltaron desde la organización, remarcando que "Santa Fe es una de las pocas localidades que ha realizado el relevamiento según lo estipulado por la ley nacional".
Los datos
El informe definitivo estará listo a principios del año que viene, pero los números del reporte preliminar ya evidencian aspectos reveladores sobre la PSC. El principal es que en Santa Fe viven en la calle 648 personas, de las cuales 621 son mayores de edad (95,8%) y 27 son menores (4,2%). En comparación a los datos del ReNaCalle del año pasado, se registra un incremento del 28% en el número de personas en esta situación.
Género y edad
85,5% de las personas mayores encuestadas son varones, mientras que fueron identificadas 64 mujeres, incluidas dos embarazadas. El 54,1% de las PSC tiene entre 19 y 35 años; el 42%, entre 36 y 45 años y 24 personas son mayores de 65. Es decir que la mayoría de las personas encuestadas está en edad de trabajar.
El relevamiento identificó también a 27 menores en situación de calle, 14 niñas y 13 niños. La mayoría (22) vive junto a sus progenitores. El 63% de ellos accede a la educación y el 81,5% cuenta con Documento Nacional de Identidad.
Ubicación y acceso a refugios
La mayoría de las entrevistas se realizaron en espacios públicos (calle, vereda, parques, plazas), mientras que 103 personas (16,5%) se encontraban en dispositivos diurnos o nocturnos. En el Parador Municipal no había personas alojadas. Por el contrario, en los Centros de Integración Social de las organizaciones sociales se encontró un gran número de personas que frecuentan talleres o alojadas en dispositivos.
De las personas encuestadas, 109 señalaron haber recurrido a organizaciones sociales y 54 a parroquias o iglesias para recibir alimentos y servicios básicos como duchas y productos de higiene.
¿Cómo llegaron a la calle?
La mitad de los encuestados manifestó estar en esta situación por primera vez, mientras que el resto ya la había experimentado previamente. Un 59,3% proviene de núcleos familiares de los que fueron expulsados o debieron abandonar.
226 personas llevan menos de un año en la calle, mientras que 319 están en esta condición desde hace más de un año. Entre este último grupo, hay 110 personas que declararon vivir en la calle desde hace más de 6 años.
El 75% de la población encuestada sabe leer y escribir. 337 personas completaron al menos el nivel primario, mientras que 118 no finalizaron ese nivel educativo. El 50% expresó interés en retomar estudios, aunque solo el 4,2% está actualmente estudiando.
Situación laboral
El 63,4% de los encuestados afirmó realizar actividades informales, como venta ambulante, trabajos en espacios públicos (cuidacoches, malabaristas, limpiavidrios) o recolección de cartones. Sin embargo, un porcentaje similar también mencionó buscar trabajo sin éxito.
Salud
El acceso a los servicios de salud es limitado. Solo el 25,1% realizó un chequeo médico en el último año, y el 23,3% lo hizo en los últimos cinco años. De las personas encuestadas, el 12,9% tiene alguna discapacidad, pero solo el 28% de ellas cuenta con un Certificado Único de Discapacidad, principalmente por desconocer cómo tramitarlo.
El 59% admitió consumir sustancias y, entre ellos, el 69,7% considera este hábito un problema. Desde que están en situación de calle, el consumo aumentó en el 71,9% de los casos. Sin embargo, sólo un tercio buscó ayuda para afrontar esta problemática.
Violencia
El 44,4% de las personas encuestadas reportó haber sufrido episodios violentos, mayormente vinculados a fuerzas de seguridad como la Policía y la Guardia de Seguridad Institucional. En relación a violencia de género, el 50% de las mujeres encuestadas indicó haberla padecido, aunque casi ninguna recibió asistencia del Estado por desconocer cómo solicitarla.
Expectativas de superación
El acceso a vivienda permanente y las oportunidades laborales, acompañados por la contención y el abordaje de equipos interdisciplinarios, surgieron como las principales vías para superar la situación de calle según las personas encuestadas. El diagnóstico subraya "la necesidad de políticas públicas inclusivas y sostenibles para abordar esta problemática de manera integral".
Metodología y estrategias
Dada la naturaleza de la población a relevar se implementaron estrategias metodológicas adaptadas a sus particularidades. Las personas en situación de calle suelen estar en constante movimiento, buscando refugio, alimentos o trabajo, lo que dificulta su identificación en un lugar fijo. Por ello, se optó por un "relevamiento exploratorio de amplia cobertura, basado en un muestreo coincidental o accidental", técnica de carácter no probabilístico fundamentada "en la accesibilidad y disponibilidad de las personas incluidas en la muestra".
Para esto se realizó un mapeo exhaustivo de Santa Fe a fines de identificar las zonas con mayor presencia de PSC según horarios y lugares de interés, como cajeros automáticos, semáforos, garitas de colectivos, plazas, entre otros. La ciudad fue dividida en 31 polígonos para ser recorridos a pie y 7 radios de dimensiones más extensas que se abordaron en vehículos.
Además, el equipo ReNaCalle organizó tres ollas populares en puntos estratégicos de la ciudad (Hospital Iturraspe Viejo, Hospital Iturraspe Nuevo y Plaza España) donde se encuestó a quienes se acercaron para obtener una vianda y responder voluntariamente el cuestionario.
Como instrumento de recolección de datos se utilizó una encuesta virtual mediante el uso de una aplicación. La misma fue respondida de manera voluntaria por personas mayores de 18 años. La información sobre las personas menores de edad fue brindada por los progenitores y/o por sus referentes.
Para poder llevar a cabo el relevamiento se realizó una convocatoria de voluntarios/as, que debieron cursar una capacitación donde se brindó información sobre la tarea a realizar y el uso de la aplicación y sobre las particularidades de las PSC. Más de 200 personas participaron de esta instancia. Luego, las encuestas se realizaron en grupos de ee entre dos y cuatro personas que, identificados con pecheras, recorrieron la ciudad.
Desde el equipo ReNaCALLE remarcaron que el relevamiento es "un hecho político", ya que "no se limita a cuantificar cuántas personas viven en las calles, sino que también busca visibilizar sus historias, opiniones y propuestas para abordar esta problemática" y "transformar una realidad profundamente dolorosa".
"La disposición de estos datos permitirá el diseño de políticas públicas más eficaces, alejadas de enfoques asistencialistas y estacionales que han predominado históricamente en nuestra ciudad", concluyó el informe, que finaliza exigiendo "abordar las causas estructurales de la situación de calle y promover una solución integral y sostenible en el tiempo con un plan sistemático para la superación definitiva de dicha condición".