Además de la elección presidencial, en 10 estados de Estados Unidos se votó un referendo para decidir si consagraban o no el derecho al aborto en las respectivas constituciones estatales. La importancia de estos votos con Trump como nuevo presidente electo.

Millones de estadounidenses se volcaron este martes a las urnas para demostrar, aún en el mismo día en el que Donald Trump era elegido para volver a la Casa Blanca, cuán relevante sigue siendo la cuestión de los derechos reproductivos dos años después de que la Corte Suprema de Justicia revocara la protección nacional al aborto.

Las y los ciudadanos de 10 estados acudieron este martes a las urnas para decidir si consagraban o no el derecho a la interrupción del embarazo en las respectivas constituciones estatales.

Siete estados votaron a favor de consolidar los derechos reproductivos, dos de ellos -Misuri y Arizona- revirtiendo la prohibición que estaba vigente y otros cinco -Nevada, Colorado, Nueva York, Montana y Meryland- modificando sus constituciones para consagrar el derecho de las mujeres a abortar. Los otros tres estados, Florida, Nebraska y Dakota del Sur, votaron a favor de mantener la prohibición.

Estado por estado

Arizona
Los arizonianos votaron a favor una enmienda -la Proposición 139- que garantizará el derecho al aborto hasta la viabilidad del feto (semana 23 o 24) y que incluye también excepciones de muerte o para la salud mental de la madre. Hasta ahora, el aborto estaba prohibido en este estado -que también ha sido clave a la hora de elegir presidente- a partir de la semana 15 de embarazo, salvo emergencia médica.

Colorado
La iniciativa de Colorado para enmendar la Constitución estatal para impedir que el gobierno del estado pueda negar o limitar el derecho al aborto superó el 55% de apoyo que necesitaba para ser aprobada. Hoy por hoy no hay límite gestacional para la práctica en este estado.

Dakota del Sur
Dakota del Sur rechazó proteger el aborto en el primer trimestre del embarazo, de acuerdo a lo que planteaba en la consulta que se llevó a cabo este martes, de menor alcance que la de otros estados. Actualmente, la ley de Dakota del Sur, una de las más restrictivas del país, prácticamente prohíbe los abortos, con la única excepción de que la vida de la mujer corra un peligro inminente.

Florida
En Florida seguirá en vigor una de las leyes más restrictivas del país, que no permite la interrupción del embarazo después de la sexta semana de gestación. Y es que, aunque una mayoría de votantes respaldó una enmienda que hubiera invalidado la legislación actual y blindado el derecho en la Constitución hasta el límite de la viabilidad fetal, no se alcanzó el 60% de apoyo que requería para salir adelante.

La Ley del Latido, tal como se conoce la norma que seguirá en pie, fue aprobada por el Congreso de Florida, de mayoría republicana, en abril de 2023 y entró en vigor el primero de mayo de este año. Quienes la infrinjan podrían enfrentar a una pena de hasta cinco años de cárcel o la pérdida de la licencia médica.

La ley contempla excepciones para cuando la vida de la gestante corre peligro, o para casos de incesto, violación o tráfico sexual, aunque los expertos dicen que en la práctica es algo difícil de probar.

Maryland
En Maryland los votantes se inclinaron por consagrar la libertad reproductiva como derecho constitucional. A diferencia de otros estados, en Maryland fueron los congresistas estatales y no los ciudadanos quienes impulsaron el referendo. Y el resultado abre paso a que la Constitución estatal sea enmendada para que contemple el “derecho a la libertad reproductiva, incluida la capacidad para tomar y hacer efectivas las decisiones de prevenir, continuar o dar fin a un embarazo”. Hoy por hoy no existe límite gestacional para poder llevarse a cabo el procedimiento en el estado.

Misuri
Los misurianos votaron a favor de revertir la prohibición casi total del aborto en el estado y establecer una garantía constitucional al “derecho fundamental para la libertad reproductiva”, incluyendo la opción de interrumpir el embarazo hasta el límite de la viabilidad fetal.

Montana
El aborto es legal en Montana y ahora sus votantes han apostado por enmendar la constitución para que incluya específicamente el “derecho a tomar y llevar a cabo decisiones sobre el embarazo propio, incluido el derecho al aborto” hasta el límite de la viabilidad fetal, o incluso hasta después si es por proteger la vida o la salud.

Nebraska
Los votantes de este estado del Medio Oeste, donde está permitida la interrupción del embarazo durante las primeras 12 semanas de gestación, se encontraron en las urnas con dos iniciativas enfrentadas en torno al aborto, pero solo una de ellas salió adelante.

La que logró los votos necesarios fue la consulta impulsada por los conservadores, que proponía ratificar el statu quo, blindando las disposiciones existentes en la ley fundamental del estado. Mientras, el texto respaldado por los demócratas y que abogaba por que la Constitución garantice el derecho al aborto hasta el límite de viabilidad del feto no logró el apoyo necesario en las urnas.

Nevada
Una mayoría de votantes de Nevada, un estado clave en las presidenciales, se inclinaron a favor de enmendar la Constitución local para incorporar en ella la protección al derecho al aborto hasta la viabilidad fetal o más allá en casos en los que la salud o la vida de la gestante esté en peligro.

Nueva York
Los neoyorquinos votaron a favor de ampliar la Enmienda de la Igualdad de Derechos de la Constitución del estado, para que prohíba expresamente la discriminación “por resultados de embarazo”.

En concreto, al dársele luz verde, la Proposición 1 permitirá que el texto legal se adapte para que contemple que a nadie se le pueden negar los derechos civiles por su país de origen, edad, discapacidad, orientación sexual, identidad de género, expresión de género, embarazo, resultados del embarazo o “cuidado de la salud reproductiva y su autonomía”.

Sus partidarios aseguran que así se protegería el acceso a un aborto seguro sin importar que haya cambios a las leyes a nivel federal, y que robustecería el blindaje legal del estado para poder mantenerse independiente en este tipo de decisiones.

Con información de la BBC