Zuckerberg respondió a preguntas sobre la adquisición en 2012 por parte de Facebook de la popular aplicación de redes sociales Instagram en el primer día de un juicio antimonopolio que podría revertir la compra.
El consejero delegado de Meta, Mark Zuckerberg, defendió a su empresa de las acusaciones de que monopoliza el mercado de las redes sociales en el primer día de un juicio antimonopolio en Estados Unidos. Meta podría verse obligada a vender las populares redes sociales Instagram y WhatsApp, que adquirió hace más de una década.
En las declaraciones de apertura, Daniel Matheson, abogado de la Comisión Federal de Comercio de EE.UU. (FTC) dijo que Meta estaba "erigiendo un foso" para proteger sus intereses mediante la compra de las dos startups y utilizó su posición para generar enormes beneficios.
En respuesta a las preguntas de Matheson, Zuckerberg dijo que "no estaba contento" con la percepción de falta de progreso en el desarrollo de una aplicación para compartir fotos que compitiera con Instagram debido a su rápido crecimiento. "Eso parece ser lo que estoy destacando", dijo Zuckerberg, añadiendo que siempre está instando a sus equipos a hacerlo mejor.
Zuckerberg dijo que "no tenía en la cabeza la cronología completa del desarrollo de Instagram" cuando Matheson le preguntó sobre la velocidad de crecimiento de la aplicación. Meta acabó "invirtiendo mucho" en la aplicación tras su adquisición en 2012, continuó Zuckerberg, refutando las afirmaciones de Matheson de que no se invertiría en la aplicación.
Es mejor comprar que competir
El principal argumento de la FTC es que Meta mantuvo un monopolio siguiendo la estrategia de Zuckerberg, "expresada en 2008: 'Es mejor comprar que competir'". Fiel a esa máxima, la FTC dice que Meta ha "rastreado sistemáticamente a rivales potenciales y adquirido empresas que consideraba serias amenazas competitivas".
La adquisición de Instagram por 750 millones de dólares (659,5 millones de euros) que hizo Meta, antes Facebook, fue la primera en la que la empresa mantuvo a su competidor como una aplicación independiente. Antes de eso, Facebook era conocida por pequeñas "adquisiciones", en las que una empresa compra una 'start-up' para contratar a sus trabajadores con talento y cierra la empresa adquirida.
Dos años después, volvió a hacerlo con la aplicación de mensajería WhatsApp, que compró por 22.000 millones de dólares (19.000 millones de euros). WhatsApp e Instagram ayudaron a Facebook a trasladar su negocio de los ordenadores de sobremesa a los dispositivos móviles, y a seguir siendo popular entre las generaciones más jóvenes mientras surgían rivales como Snapchat (que también intentó comprar, pero fracasó) y TikTok.
Sin embargo, la FTC tiene una definición estrecha del mercado competitivo de Meta, excluyendo a empresas como TikTok, YouTube y el servicio de mensajería de Apple de ser considerados rivales de Instagram y WhatsApp.
Un "saco de sorpresas" de argumentos
Mark Hansen, abogado de Meta, dijo que la FTC estaba haciendo un "saco de sorpresas" de argumentos que eran erróneos. Dijo que Meta tiene mucha competencia y ha hecho mejoras en las startups que adquirió. "Esta demanda, en resumen, es errónea", dijo Hansen, añadiendo: "Se mire como se mire, los consumidores han sido los grandes beneficiados".
Meta, por su parte, afirma que la demanda de la FTC "desafía la realidad". "Las pruebas en el juicio demostrarán lo que todos los niños de 17 años del mundo saben: Instagram, Facebook y WhatsApp compiten con TikTok, YouTube, X, iMessage y muchos otros, de propiedad china", se lee en un comunicado enviado a Associated Press.
"Los reguladores deberían apoyar la innovación estadounidense, en lugar de tratar de romper una gran empresa estadounidense y favorecer aún más a China en cuestiones críticas como la IA", continúa el comunicado. En una presentación de la semana pasada, Meta también subrayó que la FTC "debe demostrar que Meta tiene poder de monopolio en su mercado relevante ahora, no en algún momento en el pasado".
Esto, según los expertos, también podría resultar difícil, ya que han surgido más competidores en el espacio de las redes sociales en los años transcurridos desde que la empresa compró WhatsApp e Instagram. Meta no es la única empresa tecnológica en el punto de mira de los reguladores antimonopolio federales, Google y Amazon se enfrentan a sus propios casos. Está previsto que la fase de recurso del caso de Google comience el 21 de abril. Un juez federal declaró al gigante de las búsquedas monopolio ilegal el pasado agosto.