"Es muy fácil conseguir esos videos, no sabía que era ilegal", declaró Sebastián Kiczka, hermano del ex legislador, en el juicio. Los acusados enfrentan penas por delitos agravados contra menores de edad por tenencia y distribución de material de abuso infantil.
En el Tribunal Penal Nº1 de Posadas, el fiscal Martín Rau, representante del Ministerio Público, solicitó 15 años de cárcel para el exdiputado Germán Kiczka, juzgado por el delito de tenencia, facilitación y distrubución de material de abuso sexual infantil (MASI).
Germán, exdiputado del partido libertario Activar, está acusado de tenencia, facilitación y distribución de material de abuso sexual infantil (MASI); mientras que Sebastián, su hermano, es sospechoso de tenencia y facilitación de videos de violaciones en perjuicio de niños y niñas, y abuso sexual sin acceso carnal en concurso real de una adolescente de 15 años.
Juicio histórico
Al comienzo de la audiencia, según consigna Perfil, el fiscal Martín Rau consideró que se trata de un juicio histórico para la provincia de Misiones y remarcó la gravedad de los delitos cometidos. “Exhibimos vídeos de un contenido fuertísimo, que a mí en lo personal me dañaron”, afirmó. Tras su alegato, solicitó 15 años de cárcel para el exlegislador y 12 años para su hermano; ambas penas de cumplimiento efectivo.
Luego, agregó: “Estamos hablando de niños, niñas y adolescentes, algunos de muy corta edad, bebés en situaciones de abuso sexual, más bien de explotación sexual, porque no se olviden que este material circula en la red para satisfacer apetitos de personas que consumen ese tipo de materia”.
“Entonces no estamos hablando solo del abuso, sino de la explotación de niños, niñas y adolescentes, incluso algunos en prácticas zoofílicas, casi casi que en verdaderos actos de bestialismo”, insistió Rau.
La fiscalía señaló que la defensa plantea que Sebastián Kiczka tendría una “especie de compulsión” y no puede evitar consumir este material. Esta estrategia buscaría poner toda la responsabilidad por los delitos cometidos sobre el mayor de los hermanos y pedir que sea enviado a “una especie de internación” y no a una cárcel.
Además rechazaron que exista una persecución política sobre Germán Kiczka. “La otra tesis defensista estaba vinculada a la inocencia de Germán, a la persecución política, y que todo esto se debe básicamente a que es una de las fuerzas opositoras del gobierno provincial, y que por eso le están haciendo eso, para anularlos, básicamente”, manifestó Rau.
En el mismo sentido, el fiscal Antonio Glinka planteó que “nunca hubo una persecución política, nunca hubo un cuadro político, hubo simplemente las ganas de una persona que comete delitos de zafar”.
La defensa
“No sabía que era ilegal mirar estos videos en Internet”, dijo el hermano del exlegislador cuando amplió su indagatoria en una de las audiencias del debate, a cargo de los jueces Gustavo Bernie, Viviana Cukla y César Antonio Yaya, integrantes del Tribunal Penal N°1 de Posadas.
Para justificar los pedidos de pena, el fiscal Rau dijo que se tuvo en cuenta “el gran volumen” de material abuso sexual infantil hallado en los dispositivos secuestrados.

El exdiputado provincial Kiczka había sido detenido el 29 de agosto del año pasado en el balneario de Loreto, en Corrientes, después de haber estado nueve días prófugo de la Justicia.
“Nadie dice que Sebastián tienen que ser absuelto e irse. Lo que pedimos, en principio, es una medida de seguridad. Como dijeron los psicólogos, Sebastián es poloconsumidor. Una medida de seguridad que le implique un tratamiento compulsivo es su última oportunidad”, sostuvo el abogado Eduardo Paredes, uno de los letrados que representan al hermano del exlegislador.
Paredes sugirió que la medida de seguridad para Sebastián Kiczka debería ser en un establecimiento que dependa del Servicio Penitenciario de Misiones. “En vez de una pena, una medida de seguridad”, pidió Paredes.
“Lo cierto es que la conducta de Sebastián está dentro del ámbito de una desviación o patología”, explicó Paredes. Y reiteró su pedido de que le otorgue una medida de seguridad “a los efectos que sea internado en una unidad de salud mental del servicio penitenciario a los efectos de que lo traten hasta tanto pueda superar este trastorno que lo hace peligroso inclusive para sí mismo”.
La acusación por abuso sexual
Por último, el fiscal Glinka se refirió a la acusación que pesa sobre Sebastián Kiczka por abusar sexualmente de una adolescente de 15 años. “En este caso no hay ninguna duda. Tenemos precisiones casi perfectas de cómo y cuándo sucedió”, señaló sobre la situación ocurrida en 2023 en un gimnasio al que asistía la menor.
"Desde los 13 le viene hablando. Hay planificación incompatible con la estrategia defensiva”, afirmó el fiscal. Y agregó: “Había un total dominio de esa especie de relación”. El fiscal además se refirió al daño provocado a la víctima. “Privaron de tener un inicio sexual propio de una nena de su edad”, señaló. “Tenemos la posibildad de efectuar formalmente la imputacion por abuso sexual simple”, cerró Glinka.
Sebastián Kiczka afirmó que “es muy fácil conseguir videos de abuso sexual infantil”
Sebastián Kiczka declaró este martes 15 de abril en el juicio. El hombre de 47 años dijo: "Aclaro que es muy fácil de conseguir ese material". "Bajaba esos videos para mis trabajos artísticos porque andaba de acá para allá con pendrives y necesitaba imprimir cosas. Entonces, ese día aproveché y usé el dispositivo de mi hermano", comentó.
El hombre sostuvo que durante la noche que se reunió con su hermano usó la computadora para “descargar videos” y “realizar trabajos digitales”. “Aprovecho cualquier computadora ya que no tengo la mía y son grabaciones bastante extensas con una temática específica, espacial, futurista. Es considerado como un estilo ciberpunk", relató.
Sebastián cerró su declaración diciendo: “No sabía que mirar ese tipo de videos era ilegal. Para mí eso está en Internet y está al alcance. Un día, en la casa de Germán, me puse a tomar cerveza y aproveché la oportunidad para mirar esto porque soy una persona ansiosa. Se estiró la noche, me olvidé de la computadora, estaba convencido de que había eliminado todo para no dejar rastros, pero dejé el pendrive”.
Escalofriantes testimonios de los hermanos Kiczka en la causa por pedofilia: "No sabía que ver esos videos era ilegal. No puedo evitar verlos".
Esto es parte del juicio oral al exdiputado libertario Germán Kiczka y a su hermano Sebastián por tenencia y distribución de… pic.twitter.com/cu6m2GWCrP
— Data Diario - La Plata (@DataDiarioLP) April 15, 2025
A Sebastián Kiczka también se le imputa un abuso sexual simple de una menor, hecho que habría sucedido en el baño de un gimnasio de Apóstoles. El acusado sostuvo que no tuvo “ninguna relación” con la adolescente mencionada y sostuvo que no se fugó. Si bien no respondió preguntas, admitió su responsabilidad en relación al MASI y le pidió disculpas a su hermano “por haberlo comprometido” en esta causa.
El exlegislador provincial, en tanto, se declaró inocente y se desligó de los archivos que contenían imágenes de abuso sexual infantil.
Asimismo, insistió en que desde el año pasado es blanco de una "persecución diagramada" para perjudicarlo como figura política. Otra de las cuestiones que indicó fue que buscó y descargó videos pornográficos, “pero no con menores de 13 años”, acorde a lo consignado por la agencia Noticias Argentinas.
La investigación sobre los hermanos Kiczka
La investigación contra los hermanos Kiczka comenzó en Estados Unidos en enero de 2024 por la sospecha de que formaban parte de una red de pedofilia internacional.
En una entrevista con el Canal 12 de Misiones, la fiscal Daniela Dupuy se refirió a los inicios de las pesquisas y recordó que “en enero del 2024 recibimos un alerta por parte de una organización internacional que trabaja muy bien en la prevención de este tipo de delitos. A través de ellos, la fuerza de la ley detectó que en aproximadamente 15 países de la región se conectaban diferentes usuarios, intercambiándose videos de explotación sexual infantil".
Agregó que “en Argentina efectuamos muchos allanamientos de manera simultánea. Llegamos a allanar domicilios en todo el país, entre ellos el de Misiones”, al referirse a la confiscación de los dispositivos electrónicos de los hermanos Kiczka.
Del mismo modo, Dupuy aclaró que en el caso de personas involucradas con estos delitos, “el que tiene material, distribuye. El que distribuye también produce; y el que produce termina abusando sexualmente”.