Heladeras y chupetines: el aumento de las importaciones pone en jaque a la industria.

Hay preocupación entre los industriales de la provincia por el avance de los productos importados. El jueves 4 de agosto se presentó el segundo informe del Observatorio de Importaciones, elaborado en forma conjunta por el gobierno provincial y la Federación Industrial de Santa Fe (Fisfe). En la presentación, el ministro de la Producción Luis Contigiani alertó sobre las importaciones “que no vienen a integrarse al entramado productivo, sino de bienes importados que destruyen nuestro sistema productivo”.

El ministro de la Producción dio detalles sobre el impacto de las importaciones en Santa Fe: donde más se siente la liberación de las trabas aduaneras es en la producción de heladeras, licuadoras, campanas de freno, calzados, colchones, motos y hasta golosinas.

El Observatorio analizó 200 posiciones arancelarias, 22 más de las que se especificaban en el primer informe. “Esto da cuenta de una ampliación de las importaciones en productos y en números”, explicó Contigiani. “El análisis de los datos nos marca una situación preocupante. Estamos analizando importaciones que no vienen a integrarse al entramado productivo para que el país siga avanzado en la búsqueda de la sustitución de importaciones, sino que hablamos de la entrada de bienes que destruyen nuestro sistema productivo”, sentenció.

Rubro por rubro

Entre las producciones más afectadas, en la provincia, se encuentran las heladeras (las importaciones subieron un 358% entre junio de 2015 y junio de 2016) y las exhibidoras (subieron un 389% en promedio mensual). Brasil, Polonia, Turquía, China y México son los países de origen. El ingreso de estos productos impacta de lleno en Rosario y Villa Gobernador Gálvez, donde se concentra el 82% de la producción nacional de línea blanca. En el primer semestre de 2015 entraron al país 16.880 heladeras; en el mismo período de 2016, ingresaron 60.465.

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El ministro de la Producción Luis Contigiani hizo un reclamo directo a la Nación: “Estas acciones se emprenden con la expectativa de que el gobierno nacional pueda asumir esta problemática, frenar este tipo de importaciones y desarrollar políticas más exhaustivas y técnicas en términos de manejo del comercio exterior”.

Por su parte, el titular de la Fisfe, Guillermo Moretti, adelantó que se hará “un seguimiento de la situación” y aclaró: “En ningún momento planteamos parar las importaciones; lo que alertamos es que no se puede regalar el mercado interno con productos terminados. Lo que hay que importar es lo que necesitamos para producir y después volver a exportar”.

[/quote_box_right]Similar panorama se observa en el rubro licuadoras: ingresaron desde China 66.168 unidades en la primera mitad de 2015 contra 149.794 unidades en el primer semestre de este año. La suba de las importaciones de este producto fue del 226% interanual y afecta principalmente a las fábricas de Granadero Baigorria.

La importación de colchones y sommiers subió un 270% interanual, principalmente por el ingreso de productos provenientes de Brasil y Paraguay, en detrimento de las industrias radicadas en Santa Fe y Rafaela.

La importación de calzados se incrementó un 35% interanual y la de motos en un 30% interanual.

En el rubro golosinas, hubo una suba del 16% interanual en bombones, caramelos, confites y pastillas; del 37% en chicles y del 98% en chupetines.

También se detectaron fuertes incrementos en el ingreso de carne de cerdo (77% interanual), de pollos (127%) y de pollo trozado (1.332%). Los productores primarios y los frigoríficos ya habían planteado su preocupación ante la falta de medidas de parte del gobierno nacional.

La mueblería también se vio afectada por el ingreso de productos chinos que compiten a mucho menor precio. En general, el aumento de las importaciones en el rubro fue del 25% entre 2015 y 2016, pero llega hasta el 67% si se consideran solo los muebles de dormitorio para armar.

Sin embargo, el rubro más afectado es la fabricación de campanas de freno. En todo 2015 ingresaron al país 2.100 unidades; en el primer semestre de 2016, fueron 39 mil unidades. En promedio, el aumento fue del 3.714%.

Como se ve, todas las cadenas productivas de la provincia están siendo arrasadas por la política de importaciones de la Nación: desde las más complejas, como las autopartes y la línea blanca, hasta las más básicas, como la producción de alimentos y golosinas.

Granero del mundo

Hay otro dato que ayuda a entender la nueva política comercial del gobierno de Cambiemos: la Argentina exporta cada vez menos valor agregado. Así como los productores de soja y otros productos primarios pudieron exhibir números favorables durante el primer semestre, las ventas al exterior se caracterizaron por una baja sustancial de productos con valor agregado, un rubro fundamental para la reactivación de la economía. Las manufacturas de origen industrial habían representado el 32% de todas las ventas externas en 2015; este año bajaron al 27%. La Argentina, de a poco, se empieza a parecer a la de 1910: el “granero del mundo”.

En las ventas al exterior se ven comportamientos disímiles: los bienes de origen primario aumentaron un 9,6% (7.879 millones de dólares), las manufacturas agropecuarias se elevaron un 3,7% (11.424 millones de dólares), pero las de origen industrial se contrajeron un 15,9% (7.530 millones de dólares). También cayeron las ventas de combustibles y de energía. La baja fue del 30,8% (902 millones de dóalres en total), según datos de la Asociación de Importadores y Exportadores.

 

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